28 de julio de 2008

Errores Comunes de Emprendedores

Inaguramos el blog con una presentación distinta! Donde muestro, a partir de una experiencia práctica personal, cuáles son los errores más comunes de los emprendedores.


http://www.slideshare.net/LeoGargiulo/errores-comunes-emprendedores-532943


La actividad emprendedora es considerada uno de los principales motores de las economías de los países -a nivel mundial-, ya sea en lo que hace a generación de fuentes de trabajo, como así también, en lo referente a la generación de riquezas y de bienestar para la sociedad.

A tal fin, cabe resaltar que varios países de América Latina, entre los que podemos citar a: Brasil, Argentina, Chile y México tienen una alta tasa de la población económicamente activa que se dedica a emprender, lo que muestra la importancia que ha cobrado, últimamente, la actividad en la región. Lo cual, muchas veces, se ve empañado por el bajo porcentaje de éxito y durabilidad que tienen los emprendimientos en los países de la región, dentro de los mercados en los cuales operan. Evidenciando, de alguna manera, la necesidad que tiene esta actividad de ir propendiendo a una evolución (aún mayor), fundamentalmente en lo que hace al mejoramiento continuo de la gestión por parte del emprendedor.

A partir de lo expuesto, el objetivo central de la presentación que adjunto está orientada en transmitir, sobre la base de un caso real y personal del expositor, la importancia de conocer y comprender las características distintivas de los emprendimientos, como así también, a partir de la puesta en común de los errores habituales que suelen cometer los emprendedores, determinar las cuestiones y herramientas claves para gestar y desarrollar un emprendimiento de largo plazo.

Sobre la base de estos objetivos, la intención es lograr el aprendizaje empresario, aportando las herramientas necesarias para promover el éxito y la supervivencia de los emprendimientos a través del tiempo.

Algunas cuestiones a considerar

En el afán de emprender, es normal, que el emprendedor, cometa ciertos errores que pueden repercutir significativamente en el emprendimiento, incluso hasta provocar el fracaso del mismo. Los cuales, se suelen repetir en la mayoría de los emprendimientos, en el tiempo.

Es por ello, que cualquier emprendimiento, no debe pasar por alto (ni desconocer) la variable planificación. La cual, en definitiva, nos permite sentar la base del negocio, saber cómo encarar el mismo y, tener en claro, “a qué atenerse”. Esta variable termina siendo, siempre, sumamente importante para ser considerada, ya que no siempre la intuición está de nuestro lado al momento de emprender.

A raíz de esto, en los últimos años, se ha puesto énfasis en que cada emprendimiento cuente con un plan de negocios. Dejando en claro, y brevemente, que el plan de negocios es una herramienta clave y diferencial, ya que sirve como base para analizar el mercado en su conjunto, determinar sus factibilidades (Técnicas, operativas y económicas), y servir, fundamentalmente, como guía de acción “orientativa” para el emprendedor y su grupo de trabajo (Empleados, socios, etc.).

Desde el inicio del emprendimiento y a lo largo de todo su desarrollo, es común que el emprendedor, cualquiera sea el tipo de emprendimiento, suele cometer errores, los cuales se repiten a través del tiempo y en la mayoría de los emprendimientos. A partir lo citado, y recordando la frase del Canciller Von Bismark: “Los tontos solo aprenden de sus errores, yo prefiero aprender de los errores de los demás”, enumeramos algunos de los errores más habituales que cometen los emprendedores, con la intención de comprenderlos y, en lo posible, evitarlos:

1. Cuando se evalúa un negocio, es tan importante considerar cuánto se puede llegar a ganar, como así también, cuánto se puede llegar a perder. Para ver si puedo afrontarlo y cómo lo voy a hacer. La mayoría de las veces, sólo evaluamos cuánto podemos llegar a ganar.
2. Mezclar la ecuación económica con la ecuación financiera. Es importante diferenciar ambas ecuaciones. La ecuación económica hace referencia al resultado contable del negocio (Ventas menos Costos, ya sean variables y/o fijos más/menos otros ingresos y egresos), independientemente del momento en que se perciben o erogan los fondos; mientras que la ecuación financiera, está directamente relacionada con el momento de pago y cobro de las transacciones. Pudiendo de esta manera un negocio ser viable económicamente, pero no así financieramente. Lo cual, de no ser solucionado a tiempo, llevará al fracaso.
3. Seguir con el emprendimiento, más allá de que este resulte no sustentable. Por ende, es mejor salir a tiempo, antes de seguir manteniendo un emprendimiento no sustentable, sólo para salvarlo.
4. No tener en claro las fortalezas (las virtudes internas) con que cuenta el emprendimiento, ni cómo potenciarlas en el mercado en el cual interviene. Si tenemos en claro las fortalezas distintivas del emprendimiento, diseñar una estrategia clara que permita potenciarlas.
5. No tener en claro los eslabones de la cadena del negocio en el cual participan, así como tampoco el valor de cada eslabón en la cadena y la importancia que tiene, que todos ganen con el negocio (Clientes, Proveedores, Sindicatos, Gobierno, Sociedad, etc.). Importante, e imprescindible, que todos ganen, sino solo hay negocios para unos pocos, y los que pierden no se comprometerán con el negocio.
6. No exceder la estructura que resiste el negocio, es decir, la estructura debe estar en función a las necesidades del negocio y acorde con los retornos que se generan (relación estrategia-estructura).
7. Tener una mala e ineficiente asignación de los recursos (Basada en la falta de conocimiento y capacidad de gestión de los mismos).
8. No seguir una relación estrategia entre el Producto (packaging, especificaciones, etc.), su precio, el canal de venta donde se lo promociona y la publicidad que se hace de él. Por ejemplo, no puedo optar vender un producto Premium en un canal que no lo sea, ya que de esta forma estoy desvalorizando mi producto y la percepción (posicionamiento) que tienen los clientes sobre el mismo.
9. Perder de vista el objetivo que motivó el emprendimiento. Es imprescindible, tener dicho objetivo siempre claro. Procurar que las dificultades que aparecen en el camino no me desvíen del objetivo. En caso que esto pase, rediseñar el plan de negocio para este “nuevo emprendimiento” y planificar los pasos a seguir. Muchas veces, la realidad puede desviarnos del objetivo principal, provocando ineficiencias y relegando la esencia fundamental del emprendimiento.}
10. Confundir lo estratégico con lo operativo. Si bien es importante ocuparse de lo operativo (Por el clásico: “Como yo, no lo hace nadie…”). Nunca se debe dejar de lado la parte estratégica del negocio. Ya que lo estratégico, sienta las bases del negocio, exigiendo un permanente análisis de las fuerzas intervinientes en el mercado (Clientes, Proveedores, Competidores, Productos Sustitutos y Potenciales Competidores), con la intención de tener en claro el objetivo y los cursos de acción para conseguirlo.
11. Buscar siempre culpables. La idea, es evitar buscar siempre un culpable, se necesitan, resolver los problemas.

Conclusión

Por ende, y a raíz de lo expuesto, cabe considerar que para emprender, no sólo basta con intuir un negocio, a partir de una buena y novedosa idea , sino que también, hay que tener en cuenta, factores tales como: la capacidad de gestión y ejecución del emprendedor, su liderazgo, aprendizaje, mejoramiento continuo y permanencia a través del tiempo.

Sólo la conjunción de estas variables junto con las de un correcto análisis de mercado, son las que pueden hacer que un proyecto emprendedor, se transforme en un emprendimiento de largo plazo.